Sam Cooke, Ray Charles, Michael Jackson, Bobby Womack, Bill Withers, Stevie Wonder, Etta James… Siglo XXI, tercera década: Londres. Soul, no neo soul, no: SOUL. El soul superviviente del siglo siguiente a su nacimiento, sesenta años más tarde… Respirando el alma auténtica de la orgullosa música de una raza poderosa. ¿Se dice raza? Música soul: el alma efervescente del pop. El latido especial de las generaciones fundidas en el crisol del siglo XX.
Iniabasi Samuel Henshaw nació
el 22 de febrero de 1994 en Londres, desde hace ocho años canta, compone,
produce… enamora. El inglés Samm Henshaw, así se hace llamar nuestro héroe,
lanzó el prodigioso elepé Untidy soul, el primer larga duración suyo, el
28 de enero de 2022, en el Tercer Año de la Gran Pandemia.
Hijo de padres nigerianos, se
alimentó en el sur de Londres del magnífico nutriente de la música negra de las
cuatro últimas décadas del siglo XX. Samm creció musicalmente en la iglesia en
la que su padre era (y es) pastor evangélico, allí, la música góspel cimentó el
alumbramiento de un músico descomunal rodeado de rock, jazz, afrobeat… Hip-hop,
claro… Y el soul. Y los estudios de música que interrumpe cuando es fichado por
Columbia.
De 2015 es su epé de debut, The
sound experiment, al que siguió un año más tarde otro disco pequeño, otro
epé, The sound experiment 2. Después, singles… [Tenemos todo el mundo
por delante y el viejo mundo atrás / Todo el mundo adelante y el viejo mundo
atrás / Todo el mundo adelante y el viejo mundo atrás / Tú eres todo el mundo y
el mundo es mío].
Hasta Untidy soul.
Samm Henshaw no homenajea el
soul de sus mayores, no lo recrea, no lo reanima, lo continúa espléndidamente.
Si lo suyo, su gozoso sonido de eterna juventud, es o no retro-soul, que algún
nombre hay que ponerle, me importa un comino. Leo por aquí y por allá que su
voz es inconfundiblemente áspera pero dulce, una voz que vuela sobre un sonido
moderno en el pleno sentido de la palabra, un sonido que suena a futuro, al
futuro de siempre, al mejor futuro de siempre.
Henshaw es el autor, en
compañía de otros (Coleridge Tillman o Emma DD, por ejemplo), de todas las
canciones del álbum, producidas por diversos productores, especialmente y sobre
todo Joshua Grant, pero también Matt Rad o Marco Bernadis).
Untidy soul (donde Samm canta una canción con el también magnífico Maverick Sabre, la titulada It won’t change, escrita por ambos, y otras dos con Tobe Nwigwe y Keyon Harrold) será sin duda uno de los mejores discos de música pop de este año 2022. Hoy, un día de su mes de abril, es para mí el más espléndido de cuantos he escuchado. Y he escuchado muchos, por ejemplo algunos tan buenos como Fix yourself, not the world, de The Wombats; Brightside, de The Lumineers, Bronco, de Orville Peck; Hex, de Toundra; Don't forget to look up, de Maverick Sabre; The dream, de alt-J; Lucifer on the sofa, de Spoon; Earthling, de Eddie Vedder; One day, de The Cactus Blossoms; Things are great, de Band Of Horses; Royal Cantina, de Santero y Los Muchachos; o Send for me, de Catherine Russell y The boy named If, de Elvis Costello.
No bastan las condolencias, GROW juntos creceremos, porque el corazón quiere lo que quiere, deja que sea libre (tu corazón), es una obra de arte (el corazón): LOVED BY YOY detendré la tormenta, secaré la lluvia, seré la píldora que tomes para aliviar todo tu dolor, seré tu cordura en tus días más oscuros, seré tu sol, lo que más necesitas cuando te quedas sin nada… Todo lo que pido es ser amado por ti.
(Ahora)
sólo creo que hemos de tomarnos un tiempo.
No
cambiará nada. No cambiará (por) nada IT WON’T CHANGE
Cariño, son las cuatro de la madrugada en el
este de Detroit y haría cualquier cosa por escuchar tu voz, tu voz.
¿Por
qué siempre tengo que ser perfecto? ENOUGH.
Pensé que la fama me salvaría de mis errores.
No te preocupes por lo que pueda traer el mañana porque tenemos alegría, dulce alegría: tuve que conquistar mis miedos, tuve que luchar con fe, hice algunos planes para el futuro que conducen a la alegría, dulce alegría (dulce alegría), me convertí en un extraño para los amigos, pero realmente de quien soy amigo es de mis dudas, tuve que perder el panorama general sólo para descubrirme, para encontrar algo de alegría (todos nosotros lo que necesitamos es un poco de alegría) JOY Dulce alegría.
“Dos de
mis álbumes favoritos son Miseducation, de Lauryn Hill, y Late
registration, de Kanye West: más allá de que tuvieran grandes canciones,
recuerdo que los interludios siempre me llamaron la atención”. NH
El alma desordenada, atolondrada,
de Samm Henshaw, un alma que “se puede arreglar”.
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