Madrid, recién comenzada la Guerra Civil española...
El 22 de agosto de 1936 tuvo lugar una terrible matanza de la
cárcel Modelo de Madrid a manos de una marabunta de 'ciudadanos'
indignados, frente a la incapacidad de las autoridades republicanas desbordadas
como de costumbre ante la barbarie propia y la ajena.
Murieron tres decenas de personas,
bastante conocidas, políticos y militares significados que estaban en prisión
en algunos casos por sus ideas únicamente. Por sus ideas. Pero las guerras es
lo que tienen. Más las civiles.
Se cuenta que el dirigente socialista
Indalecio Prieto, ex ministro durante el primer bienio de la Segunda República
y pronto nuevamente ministro de la República ya asediada, visitó la cárcel poco
después de estos desmanes asesinos y dijo: «La brutalidad de lo que aquí acaba
de ocurrir significa, nada menos, que con esto hemos perdido la guerra».
La Guerra Civil española la perdieron gente como
Prieto, y gente como los asesinados, algunos de ellos verdaderos ciudadanos
defensores de una España sin odio.
El asalto y la posterior matanza fue
organizada por Felipe Sandoval, conocido como Doctor Muñiz (el de la
fotografía), jefe de una checa anarquista. Un tipo nacido cerca de lo que será
mi barrio que tras ser detenido al acabar la Guerra Civil se suicidó de
inmediato.
Bueno, se suicidó tan pronto pudo tirarse por el hueco de la escalera después de que la policía franquista lo redujera a pulpa. Era un asesino y un canalla, sí. Y tuvo una muerte terrible.
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