Mediterráneo, de Joan Manuel Serrat; LA CANCIÓN DEL MES
Decir Serrat para alguien
de mi generación es decir muchas cosas. Amigo, quizás.
El músico catalán Joan
Manuel Serrat es una parte destacadísima de la educación sentimental de
muchísima gente que conozco, que creció conmigo, y de millones de españoles y
aun de hispanoamericanos que han escuchado miles de veces muchísimas de sus
canciones. Canciones, en la mayoría de los casos, de una calidad musical,
humana, social, vital, gigantescas.
Canciones
como Mediterráneo. La mejor, la más
popular. La más grande. Una revista especializada, la muy musical Rolling
Stone, la reconoció en 2010 como la mejor canción del pop
español. Y los telespectadores de dos programas de televisión (de
Televisión Española ambos), uno de 2004 (Nuestra Mejor Canción) y otro de 2019
(La Mejor Canción Jamás Cantada), la eligieron como la mejor canción de la música popular
y la mejor canción jamás cantada, respectivamente.
La canción Mediterráneo estaba incluida en el elepé homónimo, publicado por la compañía discográfica Zafiro/Novola en la todavía España franquista del año 1971.
No es cierto que Joan
Manuel Serrat la compusiera durante el encierro que mantuvo en el muy catalán Monasterio
de Montserrat junto a otros intelectuales y artistas, en contra de la pena de
muerte y como protesta por el llamado Proceso de Burgos, aquel juicio
iniciado el 3 de diciembre de 1970 contra miembros de la terrorista Euskadi Ta
Askatasuna (ETA), acusados de asesinar a un taxista en 1968, y a un policía y
un guardia civil en 1969.
Serrat ha explicado en
varias ocasiones que la empezó a escribir en México.
“Estaba
en México, llevaba semanas en el interior. Soñaba, literalmente con él. Agarré
el coche y me fui a un lago, aunque sólo fuera por hacerme a la idea del mar
que yo añoraba. Es en esos casos cuando me doy cuenta de que para mí, el mar, y
concretamente el Mediterráneo, es una identidad: una identidad feliz”.
Jesús Ruiz Mantilla
recogía esas declaraciones del cantautor español en un artículo suyo para El
País el 27 de octubre de 2014 (‘Motivación e inspiración’).
También se ha podido leer
que en sus primeros borradores la tituló Amo el mar o Hijo
del Mediterráneo. Hasta se publicó que todo aquel disco fue compuesto
entre agosto y noviembre de 1970 en la Costa Brava, en la vasca Hondarribia y
en la mallorquina Cala d’Or. ¿Fue así?
Sigue leyendo, por favor.
La letra de Mediterráneo
es de una hermosura deslumbrante, un auténtico poema enorme gracias a la música
y a la voz de su compositor, a los arreglos de Juan Carlos Calderón (en
los que asimismo intervino Francesc Burrull): a la magia que roza el espíritu
de algunas canciones venidas de otro mundo para ser una parte sustancial de
éste.
sigue jugando
en tu playa
y escondido
tras las cañas
duerme mi
primer amor,
llevo tu luz
y tu olor
por
dondequiera que vaya,
y amontonado
en tu arena
guardo amor,
juegos y penas.
Yo, que en la
piel tengo el sabor
amargo del
llanto eterno
que han
vertido en ti cien pueblos
de algeciras
a estambul
para que
pintes de azul
sus largas
noches de invierno.
a fuerza de desventuras,
tu alma es
profunda y oscura.
A tus
atardeceres rojos
se
acostumbraron mis ojos
como el
recodo al camino.
soy cantor,
soy embustero,
me gusta el
juego y el vino,
tengo alma de
marinero.
qué le voy a
hacer, si yo
nací en el
mediterráneo.
Y te acercas,
y te vas
después de
besar mi aldea.
jugando con
la marea
te vas,
pensando en volver.
eres como una
mujer
perfumadita
de brea
que se añora
y que se quiere
que se conoce
y se teme.
Ay, si un día
para mi mal
viene a
buscarme la parca.
empujad al
mar mi barca
con un
levante otoñal
y dejad que
el temporal
desguace sus
alas blancas.
Y a mí
enterradme sin duelo
entre la
playa y el cielo...
En la ladera
de un monte,
más alto que
el horizonte.
quiero tener
buena vista.
mi cuerpo
será camino,
le daré verde
a los pinos
y amarillo a
la genista.
Cerca del
mar. porque yo
nací en el
mediterráneo.
El elepé Mediterráneo
fue grabado, en tan sólo una semana del otoño de 1971, en los estudios que la
compañía fonográfica italiana Fonit-Cetra Studios tuvo en Milán entre 1958 y 1998.
Los arreglos generales del disco fueron llevados a cabo por Gian Piero
Reverberi (Antoni Ros Marbá orquestó la canción Pueblo blanco) y su
diseño gráfico correspondió a Enric Satué. El ingeniero de sonido del elepé fue
Plinio Chiesa, ayudado por Gian Carlo Jametti, y lo produjeron Gian Piero
Reverberi y Juan Carlos Calderón (principal responsable este último como
sabemos de los arreglos de la canción que le dio título). Colita hizo la foto
de la cubierta. Pero, eso sí, salvo que le preguntemos a Serrat (y su memoria
sea prodigiosa) nos quedaremos sin saber qué músicos intervinieron en la
grabación de aquellas maravillosas canciones que acompañaban en aquel disco
magnífico a Mediterráneo: (Tío Alberto, Barquito de papel,
Aquellas pequeñas cosas, ¿Qué va a ser de ti?, Vencidos, La
mujer que yo quiero, Lucía, Pueblo blanco y Vagabundear),
pues como era costumbre en muchos discos de aquellos tiempos en los créditos no
aparecía ninguno de ellos.
¿Cuándo, cómo y por qué
escribió Joan Manuel Serrat semejante joya musical? Luis García Gil, autor
de Mediterráneo. Serrat en la encrucijada, es quien más sabe sobre
esta canción, más quizás que el propio Serrat…
Leámosle:
“Mediterráneo
es consecuencia de muchas cosas, es ese joven de pelo largo que parece viejo en
la manera de pintar la vida, de retratarla, de agolpar en los tres minutos de una
canción un cúmulo de sensaciones. Del capítulo dedicado a la canción en la
excelente serie La mitad invisible (TVE, 2009) nace el equívoco de que
Mediterráneo se gestó en el verano de 1970. Así lo dice el propio Juan Carlos
Ortega, narrador del documental. Y algunos van repitiéndolo erráticamente e
incluso celebraron el 40 aniversario del disco en 2010, como si tal cosa.
Curiosamente el propio Serrat ha confundido alguna vez las fechas de gestación
del álbum porque la memoria es así de engañosa. Pero Mediterráneo no
pudo concebirse en el verano de 1970 y publicarse a finales de 1971. Para
saberlo basta acudir a las fuentes, jugosas y rotundas”.
[…]
Mediterráneo fue un álbum intimista,
de introspección, de meditación, de emoción cantada que nació de un necesario
retiro del cantante, de una huida tras años de recitales, de éxitos, de
tensiones, de viajes con Lasso de la Vega como manager de hierro.
[…]
La
historia de Serrat se detuvo temporalmente para regresar con renovadas fuerzas.
‘Cuando
decidí retirarme por algún tiempo no sabía lo que iba a ocurrir, ni cual sería
la reacción de la gente. Bueno, la verdad es que eso me preocupaba poco. Y esto
no significa que sea egoísta. Debía tomar una decisión o largarme. Nada más.
Deseaba estar tranquilo, y sobre todo, trabajar en serio, sin preocupaciones.
También quería estar al lado de la gente que me quiere y a la que yo quiero. El
mundo del espectáculo me había ido distanciando de ella. Y esto no podía
permitírmelo’.
La
retirada de Serrat disparó las especulaciones aunque los motivos parecían
evidentes. En ABC se publicaba el 5 de agosto de 1971: 'Retirada
provisional de Serrat. Ha despedido a sus músicos, rescindido contratos y
abandonado los negocios para poder componer nuevas canciones'. Pero había un
cúmulo de circunstancias en esa retirada y en ese cúmulo también estaba su
relación con su representante Lasso de la Vega.
[…]
[El
elepé] Mediterráneo vino a ser la respuesta a esa encrucijada vital y
artística, una sucesión lírica de estampas, de sensaciones, de motivos y
sentimientos, de La mujer que yo quiero a Pueblo blanco, de Barquito
de papel a Aquellas pequeñas cosas, de Lucía al quijotesco Vencidos
de León Felipe. Y por supuesto el gran himno, la grandiosa Mediterráneo
con el imponente arreglo de Juan Carlos Calderón.
[…]
De
todas las entrevistas anunciadoras del disco la mejor es la de El Musical
de 31 de octubre de 1971, firmada por Joaquín Luqui que entrevista a Serrat en
su ciudad en el entorno de la Barceloneta.
[…]
De la
canción Mediterráneo dice: ‘Todos nosotros, desde España a Rusia,
estamos unidos por el mar. Es algo más que un elemento geográfico. Es parte de
nuestra cultura y nuestra educación. Es parte importante de nuestra vida. Y
nunca que yo sepa se había hecho una canción sobre este mar".
[…]
La
canción Mediterráneo -él mismo lo afirmó- le llegó [a Juan Carlos
Calderón] muy desnuda. Toda la atmósfera que la recorre -incluido su
espectacular arranque jazzístico- debió mucho al trabajo de Calderón, a la
importancia que un buen arreglista puede otorgar a una canción. En la
presentación del disco en el Teatro Victoria de Barcelona sí estaría al frente
Burrull con un magnífico grupo de músicos: Oliva, Roda, Moraleda, Rosales, a
los que sumar un cuarteto de cuerda con Josep M. Alpiste, Joan Olivé, Joan
Oliveras y Pere Busquets”.
¿Cuántas veces has
escuchado Mediterráneo? Yo no me canso. Serrat tampoco de cantarla:
“Jamás,
jamás, renegaré de esta o de cualquier otra de mis canciones. Me sentiré
eternamente agradecido, son ellas quienes me han hecho lo que soy. Así que
siempre la cantaré por obligación, pero lo que es más importante, por gusto”.
POR CIERTO… Leo en la
revista Efe Eme que el elepé Mediterráneo “es recreado por, entre
otros, Jorge Drexler, Eva Amaral, Andrés Calamaro, Iván Ferreiro, Xoel López, Depedro, Santi Balmes y
Josele Santiago, en Hijos del Mediterráneo, un álbum que
aparecerá en noviembre, ideado y dirigido por Amaro Ferreiro y producido por
Ricky Falkner”.
A Serrat le hice
protagonizar un cuento mío titulado 'Un gorrión baila una canción de Serrat',
que puedes leer en este ENLACE.
También me he atrevido a
escribirle algún poema…
Escuchar a Serrat
cantarle a la vida
es una fiesta de barrio
de esas de día grande,
es un trago de vino
con los ojos cerrados,
es un regalo de nuestros
primeros cumpleaños;
escuchar a Joan Manuel
emocionarnos
es volver a las cintas
de cassette y a los
balones,
es imaginar el amor
antes de cada noche
juvenil,
es sobornarle al tiempo
para robarle nuestras
fotos;
escuchar a Juanito
triunfar sobre la muerte
es oler el mundo
completo.
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