Soy anglófilo, me gustan muchas cosas de allí, desde el gótico
vertical a los Beatles. Pero creo que nunca me he sentido más menospreciado que
un día, cuando con perfecto acento BBC y sin un tono más alto que otro, alguien
me dijo sin decir un montón de cosas: que mi educación (debido a mí origen) le
parecía poco fiable, que no iba a encontrar allí ni un gramo de empatía, que no
se fiaban de mí. Protobrexit.
En Cataluña ocurre algo parecido con mucha gente. No eres de aquí,
procedes de un país eeh... diferente, la civilización es nuestra, somos la
Dinamarca/Shangri-la/la hostia en verso/ mediterránea. Parte de la rabia o el
estupor de hoy tiene ese origen ¿CÓMO pudo pasar esto? ¿A nosotros? Pero si
ELLOS son débiles, mesetarios, su país es fallido... ¿Este puto desastre, esta
chapuza sin paliativos, este desenlace ridículo? ¿Cómo es posible que
Europa...?
Tienen dos salidas: la cura de humildad (rebajar lentamente el
nacionalismo supremacista a una opción ciudadana, exactamente igual a cualquier
otra) o... la rabia. Y veo pocos signos de lo primero.
Comentarios
Publicar un comentario
Se eliminarán los comentarios maleducados o emitidos por personas con seudónimos que les oculten.