Jon Bilbao y su excepcional trilogía de cuatro novelas

La octava novela del escritor español Jon Bilbao, publicada en 2024, es la tercera de una trilogía compuesta por cuatro libros. ¿Cómo te quedas?


Matamonstruos
—sensacional ejercicio arriesgado de literatura de esos que acaban bien, que salen bien, que impactan de verdad, mucho más de lo que se espera de esa otra escritura pretendidamente vanguardista de algunos empalagosos desparramadores de humo sobre la nada— es una demostración descomunal de arte narrativo.

 

“Siendo ya un adulto y dedicándose a la escritura de ficción, Jon solía leer declaraciones de otros escritores en las que afirmaban que la ficción no ofrece respuestas, no alberga verdades, no resuelve nada, no construye, no restaura, no limpia, no cura, palabras tras las que él veía resabio, cinismo y un reconocimiento implícito si no del fracaso sí de la sensación de fracaso”.

 

Que no limpia, dicen. Jon Bilbao sabe que sí. La literatura limpia, restaura, construye verdades al ofrecer respuestas a preguntas que los lectores no sabríamos hacernos.

De hecho, en Matamonstruos admite (a continuación) “que, en efecto, la ficción no alberga ningún poder sanador en sí misma, pero que quizá sí pueda servir como brújula, como mapa desdibujado, como instrucciones en forma de acertijo intrincado que orienten sus pasos hacia ese espacio interior donde se convertirá en alguien más fuerte”.

De manera que el autor de Basilisco, Araña, Matamonstruos y Los extraños empieza a teclear con esa aspiración de que sus narraciones sirvan como brújula que le haga alguien más fuerte (“no todos los días, solo algunos”). Y de paso, nos da un poquito de fe en que la literatura pudiera sanarnos a quienes le leemos.

En Matamonstruos aparece “el ampliamente renombrado pistolero, protagonista de una colección de novelas”, a quien llaman el Basilisco y es John Dunbar (protagonista de Basilisco y Araña, de las que ya dije que eran libros formidables, de una reciedumbre mayúscula) y también Jon, el escritor (coprotagonista de las dos citadas y de la cuarta parte de esta trilogía peculiar hasta en su composición de cuarteto sobrevenido: Los extraños, otra gran novela).

 

“¿Puedes explicarme, John, por qué tus sueños, tus fantasías, son siempre menos felices que la realidad que habitas? Lo deseable, lo benéfico ¿no es ansiar algo mejor que lo que tenemos? ¿Por qué todo has de interpretarlo como un vaticinio del desastre, como el prefacio de una historia calamitosa? Tu imaginación es más peligrosa que cualquier indio. Es una fuerza magnética y oscura que te arrastra a lo fantástico, hacia lo imposible, hacia tramas demasiado complicadas, hacia creer que las cosas son más complejas de lo que en realidad son. Y ella aún continuó: Se diría que contra tu imaginación nada puede la realidad, incapaz de desvelar la carencia de pretexto de todas esas fabulaciones, y más incapaces son aún las palabras, las palabras que yo te dedico, que para ti siempre van seguidas de un pero mudo: Te quiero, pero… Deseo pasar el resto de mi vida a tu lado, pero… Soy muy feliz de tener una hija contigo, pero… ¿Por qué no te crees merecedor del cariño que recibes, de tu ración de bienestar?”

 

La fuerza magnética y oscura que arrastra a lo fantástico a John Dunbar. ¿Y a Jon? ¿A Jon Bilbao? El mismo Jon Bilbao que convierte en alguien más real al personaje de ficción que creó después de haber oído hablar hacía un año de su existencia siglo y medio atrás: “el Basilisco, esa metáfora inmunda y agotadora”. El mismo Jon Bilbao que en Matamonstruos cuenta que escribió “un relato sobre una pareja que viajaba a la isla de Estrómboli” (incluido en el magnífico libro de relatos titulado así: Estrómboli). El mismo Jon Bilbao que en Matamosntruos admite que “cuando escribimos cometemos los mismos errores que en la vida”. El mismo Jon Bilbao que, al igual que Dunbar, quizás luche contra monstruos que son la dos cosas: reales y simbólicos.

 

[…]

 

¿Es Jon Bilbao de esas personas “dotadas de, o condenadas a cargar con, unas fantasías que se desbordaban del ámbito de la mente e inundaban el de la realidad con consecuencias imprevisibles”? ¿Es el Jon Bilbao que aparece en Matamonstruos de esas personas “dotadas de, o condenadas a cargar con, unas fantasías que se desbordaban del ámbito de la mente e inundaban el de la realidad con consecuencias imprevisibles”?

Matamonstruos y “las nupcias eternas ente la ficción y la realidad”. El mundo en el que vivimos y somos, donde las ficciones se nutren de la realidad y la realidad se beneficia de los frutos de las ficciones.

Palabra de Jon Bilbao.

 

Este texto pertenece a mi artículo Matamonstruos (de Jon Bilbao) y el umbral entre la realidad y la ficción’, publicado el 25 de octubre de 2024 en Letras 21, que puedes leer completo EN ESTE ENLACE.

Comentarios

Entradas populares

Los textos incluidos en este blog son propiedad exclusiva de sus autores. Se permite su uso y reproducción, siempre y cuando se respete su integridad, se cite la fuente y su utilización no busque fines comerciales ni implique la obtención de ingresos económicos de cualquier tipo.