La estatua ecuestre del general Martínez Campos
Arsenio Martínez Campos se pronunció
(dio un golpe de Estado militar de aquellos decimonónicos) a favor del regreso
de la Casa de Borbón a la jefatura del Estado español. Cinco años después, en
1879, ejerció como presidente del Gobierno. Reinaba el hijo de la desterrada Isabel
II, Alfonso
XII, a
quien había ayudado en aquel pronunciamiento que había acabado por completo con
la Primera República española.
Héroe militar en distintas guerras, hay
un monumento suyo, ecuestre, obra del escultor Mariano Benlliure, en la plaza
de Guatemala, en el madrileño parque del Retiro, que se erigió tras la
convocatoria preceptiva de un concurso realizada por una comisión presidida por
Julio de Urbina, marqués de Cabriñana, tras una suscripción popular. El monumento fue
inaugurado el 28 de enero de 1907, reinando ya el hijo de Alfonso XII.
De
esa estatua dice el escritor Emilio Gavilanes en su reciente
libro, Bazar, que es "el monumento más melancólico que se
pueda imaginar, parece que vuelve de una derrota: es una imagen de
western".
Comentarios
Publicar un comentario
Se eliminarán los comentarios maleducados o emitidos por personas con seudónimos que les oculten.