Celia Rico, Lola Dueñas y Anna Castillo y el silencio

Viaje al cuarto de una madre es una película española del año 2018. Su hora y media de duración (el metraje ideal, a mi modo de ver) es una demostración excelente del maravilloso arte de la interpretación escénica, teatral, cinematográfico. Lola Dueñas y Anna Castillo protagonizan una conmovedora y exacta pieza de arte de nuestro tiempo. Actual, clásica.

Mario Vargas Llosa nos explica que existe un recurso narrativo al que podríamos llamar el dato escondido (también narrar por omisión), que consiste en utilizar “silencios significativos, datos escamoteados por un astuto narrador” para azuzar la imaginación del lector y que éste ponga de su parte para completar aquello que falta y que ejerce “una influencia inequívoca sobre la parte explícita de la historia”. Se trata de “narrar callando”, de crear una expectativa forzando al lector a “intervenir activamente en la elaboración de la historia” y así incrementar el poder de persuasión de lo narrado. Vargas Llosa nos habla de literatura, pero en esta película, el dato escondido es el principal protagonista del film. El padre desaparecido, a quien no vemos jamás, de quien no se habla nunca. Y ellas, la esposa y la hija, ellas, Dueñas y Castillo, sosteniendo brillantemente una hermosamente dolorosa película excelentemente fotografiada por Santiago Racaj, sucinta, cabalmente dirigida por Celia Rico Clavellino, que además la escribió maravillosamente.

No se puede decir que lo mejor de la película sean sus elipsis, que son magistralmente incorporadas a lo que se nos cuenta, a lo que vemos y a lo que no vemos. Y no se puede decir porque lo mejor de esta película, y ya es decir, es el arte actoral de dos inconmensurables actrices brillantemente dirigidas para encauzar su poderoso atractivo interpretativo hacia los ojos emocionados de los espectadores. Los míos, sin ir más lejos.

Si te gusta el cine calmado, hermosamente moroso, pero no detenido helador en el tiempo absurdamente estancado, no te pierdas Viaje al cuarto de una madre. Si ese tipo de cine no te gusta, no te preocupes, si tú quieres puedes estar viendo una película de superheroínas siempre y cuando te dejes embarcar en ese delicado viaje sobre el océano de la vida que se resiste a sucumbir, a ser derrota y memoria.

Comentarios

Entradas populares

Los textos incluidos en este blog son propiedad exclusiva de sus autores. Se permite su uso y reproducción, siempre y cuando se respete su integridad, se cite la fuente y su utilización no busque fines comerciales ni implique la obtención de ingresos económicos de cualquier tipo.